En el juego inaugural de la Serie Mundial de Ligas Pequeñas en Williamsport, el equipo de México ganó 2-0 a Aruba con un sin hit ni carrera combinado.
El abridor Antonio Guerrero, lanzó por espacio de 5 entradas completas, con 11 ponches, mientras que Raúl Hernández completó la hazaña con el que el equipo de la Liga Matamoros AC, consiguió el quinto juego sin hit mexicano en la historia del torneo infantil.
Las dos carreras del juego fueron anotadas en la segunda y cuarta entradas. Ahora los tamaulipecos enfrentarán el viernes a Venezuela, buscando otra victoria que les permita abrirse camino para avanzar a la ronda final.