Parecía que todo estaba perdido para el México, un Grand Slam de Yariel Gonzalez en el cierre de la sexta entrada puso la pizarra 10-4. Oaxaca tenía una ventaja de 6 carreras y necesitaba 9 outs para asegurarse su tercera victoria en la serie y ponerse a una de obtener el boleto a la Serie Final.
Pero cuando el equipo que está abajo tiene un líder de la calidad de Robinson Canó, que ha demostrado experiencia y capacidad para salir de las adversidades, nada se puede dar por perdido. Quizá el dominicano no tuvo su mejor juego a la defensiva, pero de la misma manera en que fue el mejor bateador del equipo en la temporada regular, levantó la cabeza y puso al equipo capitalino de nueva cuenta en el juego. Inclusive con un impulso que le dio la ventaja a los Diablos.
En la parte alta de la séptima, Robinson Canó conecta un homerun de tres carreras por el jardín derecho, que pone la pizarra 10-7 y pone a los Diablos en el juego de nueva cuenta.
En la parte alta de la novena entrada, Robinson Canó conecta otro homerun, ahora por el central con uno en base y sin outs, para que el México se acerque 10 a 9. Luego una base a Pirela y un triple de Ramón Flores permitirían a los escarlatas ponerse arriba en el marcador 11-10.
Todo se derrumbó a continuación, el esfuerzo fue en vano, porque en el cierre de esa novena entrada de locura, entró al relevo Jake Sánchez, y no pudo controlar a los Guerreros, le conectaron tres imparables y los Diablos se quedaron tendidos en el terreno.
Finalmente, Oaxaca sí ganó y se pudo a un juego de llegar a la Serie del Rey.