Max Scherzer y los Blue Jays acordaron este jueves, un contrato de un año que tendrá un valor de 15.5 millones de dólares dependiendo de un examen físico. De esta manera la rotación de los Blue Jays mejora en el papel, con un tres veces ganador del premio Cy Young y ocho veces All-Star. Scherzer tiene ahora 40 años, pero sigue siendo uno de los mejores lanzadores de esta generación.
Durante gran parte del receso invernal, los esfuerzos del equipo de Toronto estuvieron definidos por sus fracasos, sobre todo en su búsqueda de Juan Soto y Corbin Burnes, y luego de Roki Sasaki. Sin embargo, al contratar a Anthony Santander y ahora a Scherzer, la narrativa está cambiando en torno al equipo, que aún debería tener la flexibilidad financiera para agregar más talento antes del inicio de los entrenamientos de primavera. Además, si 2025 podría ser el último año de Vladimir Guerrero Jr. y Bo Bichette en Toronto, ¿por qué detenerse aquí?
Scherzer ha sido una fuerza en el montículo durante 17 temporadas, sus 2,878 entradas repartidas en seis organizaciones le dan la posibilidad de alcanzar la marca de las 3,000 entradas en 2025.
Ha ganado todo, incluido un anillo de Serie Mundial con los Nationals en 2019 y uno con los Rangers en el 2023, por lo que los Blue Jays están apostando por su increíble trayectoria y su característica intensidad.
El año pasado, el inicio de temporada de Scherzer se retrasó mientras se recuperaba de una cirugía de espalda y un eventual problema nervioso, pero regresó a fines de junio para darle a los Rangers una efectividad de 3.95 en 43 1/3 entradas. La salud será un factor aquí, pero al parecer en Toronto son expertos en mantener sanos a sus peloteros.
Agregar a Scherzer lleva la rotación de los Azulejos a otro nivel. Se unirá a Kevin Gausman, Chris Bassitt y José Berríos, formando un cuarteto de veteranos que suma 48 temporadas combinadas de experiencia en la MLB con 7,109 entradas lanzadas.