El lunes pasado Trevor Bauer regresó a México después de haber estado sometido en Arizona a un tratamiento para terminar con la infección gastrointestinal que lo atacó de manera severa. Ese mismo día tuvo una práctica con bateadores en el terreno del Estadio Alfredo Harp y posteriormente en una entrevista dijo que se sintió bien y afirmó estar al 100%.
Ese mismo día, unas horas más tarde, los Diablos anunciaron su rotación de abridores para el siguiente playoff, y Trevor Bauer apareció en la lista para lanzar hasta el tercer juego de la serie, justamente el primero en el que los Diablos Rojos del México jugarán como visitantes. El mánager, Lorenzo Bundy, confirmó la rotación de abridores para la Serie de Zona, empezando con Brooks Hall, luego Erick Leal para el segundo duelo y hasta el tercero, Trevor Bauer.
Lo que parece es que Bauer prefirió realizar su reaparición en un estadio en el que no tenga que lidiar con la altura de la CDMX. Hay que recordar que Trevor es todo un estudioso de las condiciones físicas que le ayudan a potenciar su pitcheo, y en varias ocasiones se ha referido a la altura de la CDMX.
Habrá quien diga que es decisión del mánager y él no tiene decisión, pero en casos especiales como el de Bauer en el que es un superestrella con un nivel muy superior al promedio de la liga y que además es un aliado estratégico del equipo (en el uniforme aparece su marca entre los patrocinadores), pues simplemente su palabra sí pesa…y mucho.
Pensamos que cualquier mánager en situaciones normales siempre va a decidir arrancar un playoff con su mejor pitcher, cuando todos sus abridores están descansados y al 100%.
Para Trevor Bauer será más cómodo regresar a la actividad en Yucatán al nivel del mar, y si llegará a haber un séptimo juego, sin duda ahí sí estaría lanzando ante la afición de la capital.