Page 17 - Beisbol MX Num. 27

FELIZ CUMPLEAÑOS 61 A NUESTRA QUERIDA LIGA OLMECA
Hablar de la Liga Olmeca es remontarse a un viaje lleno de emociones y aprendizajes que han marcado la vida de miles de niños y niñas a lo largo de los años. En 1963 (el 17 de marzo), un grupo de
personas valientes y dedicadas tuvo la visión de crear la “Liga Pequeña de Beisbol Olmeca”, un lugar donde sembrarían las semillas de la pasión por el deporte y la camaradería.
Gracias a su tenacidad y esfuerzo, esta pequeña liga se convirtió en mucho más que un lugar para jugar beisbol y softbol; se convirtió en una verdadera familia, donde cada niño y niña encontraba un espacio para crecer, aprender y soñar en grande.
Con el paso de los años, los niños que una vez corrieron por esos primeros campos de juego crecieron y necesitaron nuevas oportunidades para seguir desarrollándose. Fue entonces cuando se formó la división intermedia juvenil, abriendo las puertas a una nueva etapa en la Liga Olmeca.
La historia de la Liga Olmeca se entrelaza con la generosidad y el apoyo de la comunidad, la liga originalmente tuvo sus primeros campos en Miguel Ángel de Quevedo y Av. Universidad, fue en marzo de 1963, que el gobierno del entonces llamado Distrito Federal brindó un nuevo hogar a la Liga Olmeca, en la zona conocida como Barranca del Muerto, donde se construyeron originalmente cuatro campos y posteriormente se tuvo
la necesidad de construir dos diamantes más, para en total tener seis campos que se han convertido en el escenario de innumerables momentos de alegría, superación y amistad.
Hoy en día, es en esos mismos campos donde los hijos e hijas de aquellos primeros jugadores, nuestros hijos corren, juegan y sueñan con un futuro brillante. La Liga Olmeca ha formado no solo jugadores de beisbol y softbol, sino también mujeres y hombres de bien, inculcando valores como el trabajo en equipo, la perseverancia, disciplina y el respeto.
Cada rincón de la Liga Olmeca guarda historias de sacrificio, pasión y amor por el Rey de los Deportes. Es un lugar donde la magia del beisbol y el softbol se mezcla con la calidez de una comunidad unida en torno a un mismo sueño: ver crecer a nuestros hijos e hijas en un ambiente sano y lleno de oportunidades.
La Liga Olmeca seguirá siendo un faro de esperanza y crecimiento para las generaciones venideras, recordando siempre con gratitud a aquellos pioneros que con su visión y dedicación hicieron posible este hermoso legado.
¡Que siga brillando la luz de la Liga Olmeca por muchos años más!
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