En un día en el que los Cincinnati Red disfrutaron de una explosión ofensiva sin precedentes en más de tres décadas, una jugada defensiva quizás sobresalió más. Por supuesto, provino nada menos que del shortstop estelar Elly De La Cruz.
De hecho, la capacidad de De La Cruz se manifestó en toda su magnitud desde el principio, durante la paliza de 24-2 a los Orioles en el último partido de la serie el domingo en Camden Yards, que aseguró la serie para los Reds. Tan solo en las primeras tres entradas, De La Cruz ya nos había regalado tres muestras de su especial capacidad: una atrapada estilo Superman de clavado que dejaba sin aliento a acualquiera, un homerun y una base robada.
Esta histórica paliza deja muchos párrafos para los libros de récords de la organización:
-Cincinnati anotó 24 carreras por cuarta vez desde 1901, siendo la última vez contra Colorado el 19 de mayo de 1999. El récord del equipo es de 26, anotado el 4 de junio de 1911 contra los Bravos de Boston.
-Los 25 hits de los Rojos también fueron su mayor cantidad desde ese mismo partido contra los Rockies, cuando conectaron 28.
-Sus 15 hits con corredores en posición de anotar fueron la mayor cantidad de los Rojos desde que se comenzó a contabilizar esa estadística en 1975.
-Se estableció un nuevo récord de la franquicia moderna en un solo juego, ya que el equipo se embasó 38 veces, incluyendo 11 bases por bolas. Los Reds se embasaron 78 veces en la serie, su mayor cantidad en una serie de tres juegos desde 1900.
-Todos los jugadores del lineup titular de los Reds, además del jardinero derecho Blake Dunn, que salió de la banca, conectaron al menos un hit.
-Austin Hays y Noelvi Marte conectaron cuatro y cinco hits, respectivamente, con Marte conectando un grand slam en la octava. Hays y Gavin Lux anotaron cuatro veces cada uno.
