Los Dodgers tienen más de mil millones de dólares invertidos en Shohei Ohtani, Mookie Betts y Freddie Freeman.
Además, hay otros jugadores “caros” como Teoscar Hernández que conectó 33 homeruns esta temporada y fue titular en el Juego de Estrellas, o Kiké Hernández tiene en su currículum tantos homeruns de postemporada como el mismísimo Babe Ruth.
Y, sin embargo, el bateador que lidereó el camino en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional es un jugador que no estaba contemplado en el elenco, un reclutado la fecha límite de cambios que jugó su primer juego de la temporada de Grandes Ligas el 19 de agosto.
Tommy Edman estuvo a la altura del momento para alcanzar la Serie Mundial, impulsando cuatro carreras enormes para capturar los honores de Jugador Más Valioso de la NLCS en la victoria de los Dodgers 10-5 en el sexto juego. Anotó 11 carreras en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, empatando a Corey Seager con la mayor cantidad de carreras impulsadas en una serie de postemporada para los Dodgers desde que esa estadística se hizo oficial en 1920.
Edman conectó dos hits de suma importancia en sus primeros dos viajes al plato en el Juego 6 del domingo. Su doble de dos carreras en la primera entrada puso a los Dodgers adelante, 2-1, y en la tercera entrada conectó el primer homerun de su carrera en postemporada.
Al comenzar la serie, se suponía que la defensa de Edman sería su aportación importante, con Miguel Rojas fuera por una lesión en la ingle, Edman se convirtió en el shortstop titular, pero pocos pensaron que sería el hombre clave de la ofensiva.
