A principios de octubre el huracán Milton destruyó la estructura del Tropicana Field en Tampa Bay, y un informe de evaluación de daños realizado por expertos, dice que puede repararse a tiempo para la temporada 2026 de los Rays por alrededor de 55.7 millones de dólares, de los cuales 39 son por los daños causados y el resto en costos como diseño, permisos, seguros, inspección, personal y contingencias de construcción.
El elemento más costoso de reemplazar será el techo, que representa alrededor de 23.6 millones de la factura y la gran pregunta es si la ciudad querrá gastar esa cantidad en lo que podrían ser solo dos temporadas de uso, dados los planes para construir y abrir un estadio en 2028.
El alcalde, Ken Welch, dijo que el informe era una buena noticia y planteó la posibilidad de que los Rays jugaran tres temporadas en un Tropicana Field reparado, con el nuevo estadio retrasándose un año. Según el acuerdo original del Ayuntamiento con el equipo firmado en 1995, el pacto queda “suspendido” si la instalación no es apta para jugar partidos en casa y se prorrogará por una temporada.
El presidente del equipo Matt Silverman, comentó que continuarán teniendo conversaciones con la ciudad sobre cómo seguir adelante. La decisión de seguir adelante con las reparaciones recae en el Ayuntamiento y al parecer existe buena voluntad del gobierno para cumplir.
Desde poco después de que azotara la tormenta el 9 de octubre, los Rays han estado buscando un hogar interino al menos para el inicio de la temporada 2025. Según el informe, necesitarían uno para toda la temporada.
Por ahora los Rays buscan un hogar provisional, los empleados del equipo se mudaron recientemente a un espacio alquilado en un edificio de oficinas cerca del Tropicana, y los funcionarios están trabajando con MLB para asegurar un lugar para jugar. El comisionado, Rob Manfred, dijo que preferiría que la casa provisional estuviera en el área de Tampa Bay y lo más probable es que sea uno de los estadios de entrenamiento de primavera, siendo el BayCare Ballpark de Clearwater y el Steinbrenner Field de Tampa los más viables. Saber cuánto tiempo permanecerían desplazados es un factor clave en el proceso de toma de decisiones.