
Estos últimos días han sido los más felices para Isaac Paredes desde su llegada a Houston.
Luego de que el fin de semana cumpliera 500 juegos en Grandes Ligas, el domingo, el tercera base sonorense, en un gesto romántico, le pidió a la joven de Navojoa, Paulina Quiroz, que aceptara ser su novia y lo hizo de una manera muy singular y un tanto espectacular utilizando las grandes pantallas del Daikin Park, estadio de los Astros de Houston de la MLB.
Y el martes, se vistió de héroe con el primer Walk Off Homerun de su carrera. En la novena entrada del juego contra los Kansas City Royals, con la pizarra empatada a una carrera, Paredes le pegó “en la nariz” a un piitcheo del lanzador John Schreiber, y puso la pelota del otro lado de la barda por el rumbo del jardín izquierdo, para dejar tendidos en el terreno a los jugadores del equipo visitante.
Houston ganó 2-1 y Paredes subió su promedio de bateo a .265, además de apuntarse su quinto cuadrangular de la temporada.
24 horas después, en el juego dle miércoles y también contra Kansas City, Isaac se apuntó otro batazo de vuelta entera, que fue, su sexto de la temporada.